una que otra cosilla

“Déjenme decirles una cosa sobre lo que yo pienso del reggaetón: Yo odio el reggaetón, pero decir que lo odio es una falacia; no sería hacer justicia a lo que realmente siento y sin embargo no los culpo, quiero que sepan muy bien que no los culpo, por que pasa y resulta que no hay palabras ni en el alfabeto castellano ni en ningún otro sobre la faz de este mundo para describir lo mucho que el reggaetón me parece UN MALDITO GENERO VOMITIVO ASQUEROSO, INMUNDO, MUGROSO Y SUCIO EN UN TODO Y SOBRE TODO MI OPINIÓN DE LOS QUE ESCUCHAN ESTE DISQUE GENERO MUSICAL QUE PARA MÍ ES UNA COPROFAGIA AUDITIVA.”

Ángel David Revilla “Dross”

Esta cita textual me da pie a hacer algo que no he hecho en este blog: CRITICAR LO CRITICABLE

Empecemos por lo más criticable:

EL FANATISMO

Y de este hay mucho pero me enfocare en los que más detesto: el religioso y el musical (existe deportivo, educativo, de bandera etc.).

RELIGIOSO

Yo critico a la religión por existir y lavar el cerebro a la gente estúpida, de por si los pobres son tan pendejos que dependen de ella en primera instancia. Pero pese a lo mucho que la pueda criticar, prefiero decir “a cada quien su santo”. En primera porque me considero en mi mismo una persona muy respetuosa a los pensamientos ajenos, además de que yo mismo creo en dios, pero que se denote que no creo en una religión en especifico, de hecho no creo en ninguna y punto; creo en un ser omnipotente que nos creo y que nos observa, que quizá ya sabe que pasara con nosotros y que en ningún caso interfiere con nuestra existencia, nos da el libre albedrio aunque este limitado por el destino o “el plan maestro”.

Dicho lo cual.

Una cosa es expresar así como lo hice yo, nuestro pensar simple y llanamente y otra muy distinta fanatizarse; empezando por los que quieren vender religión, es decir, los que van de puerta en puerta queriéndote platicar de la palabra de dios según lo ven ellos, a estas personas, no me queda más que correrlas gentilmente de mi casa con las palabras “disculpe, no quiero ser molesto pero no le compro sus ideas, yo respeto lo que piensa y quiero que haga lo mismo, que tenga un buen día y por favor a mi casa no vuelva” y siguen viniendo dos o tres veces por semana, no pienso ser más grosero pero tal vez les cierre la puerta en la cara. Hay gente que es más extrema en su fanatismo y quieren que la gente los siga, creando dogmas quizá más pequeños que los que crearon los católicos, pero de la misma forma lo hacen de una manera estúpida.

Como sea tampoco me quiero alargar con el tema pues no quiero que se me confunda con una fanático anti-religioso que según mi modo de ver las cosas no soy.

MUSICAL

Y de aquí viene la cita por la que parto. YO DETESTO LA MALA MUSICA o por lo menos lo que yo considero mala y quizá se me puede considerar un fanático musical, o de la música “correcta”.

Detesto el reggaetón y lo hago en demasía, porque es un género estúpido, con letras vacías y un ritmo soez, aburrido y que creó una partida de legos más grande que otras estupideces (no cuentan los partidos políticos ni la religión pues son aparatos del estado). Así que si tu eres de los que escuchan reggaetón déjame decirte que la música que escuchas me parece enfermiza, pero que si es tu gusto adelante, no soy quien para impedir que te gusten esas cosas, lo que si te pido es que nunca hagas la mamoneria que hacen los fanáticos religiosos y me intentes vender “tu” música, porque con ellos he sido corte, pero contigo seria un culto culero.

La coprofagia es una aberración de la cual tampoco hablare, pero se me hace al igual que se le hace a Dross, del mismo nivel que el reggaetón; por tanto no me queda más que decirles a todas aquellas personas que quieren imponer este género sobre cualquier otro y que de hecho son fanáticos REGGETOÑEROS:

Hagan el favor de copular con su cortesana progenitora de magnitudes colosales.

MORGAN OUT